DIARIO DE GRABACION: II) Llega la distorsión

Me temo q este diario va a ser d lo más epiléptico, sin orden ni concierto, sin tón ni són, sin sentido y encima prolongado en el tiempo. Y es q con el tiempo hasta una grabación se desdramatiza. Algo q antes era súper-trascendental, q se debía realizar con la máxima concentración, disciplina -eso no excluye cierta lisergia, tampoco hay q ser nazis- y planificación, ahora es una etapa más de esta bohemia constante q es la vida chocadélica. Sin pasta, sin apoyos, sin timmings ni presiones los recordings son casi cómo fumar un buen porro de marihuana: si la materia prima es buena, todo va a salir bien sea el momento q sea, el tema q sea, y el instrumento q se grabe. Basta de gravedad, lo hacemos porque queremos, pues no nos agobiemos por el camino.

Pues eso, q ya con 5 bases (baterías y bajos), empezamos a meter unas guitarras Chokapic y yo. Se q está feo q chupe pollas tan pronto, pero es q el bueno de Chokapic se merece q le afile el sable. Pocas veces se encuentran a seres tan jodidamente creativos con su instrumento. O sea, hay buenos escritores, buenos intérpretes, putos virtuosos, y luego están las personas q tienen el gusto y la capacidad para aportar con su instrumento lo q una canción necesita. Ese es uno d los mayores elogios q se puede hacer a un músico, y yo tengo la suerte de trabajar con varias personas así tanto en Chocadelia cómo en los Manero. El mamao de Chokapic llega al local y: 1) O destruye amplificadores y mina la moral de todo aquel q se cruce en su camino cuando está de mal humor, o 2) Tras dos escuchas de una canción nueva crea de la nada unas línias de guitarra q la redefinen y la teletransportan hacia adelante. Y lo peor es q el hijoputa tiene un control casi absoluto del sonido de su material y sabe encontrar el ideal en cada momento. Mandolinas, telecasters, stratos, twin reverbs, vox, lap steels, slides, marshalls, laudes,... sabe de todo y lo toca todo con gusto.

Es cómo mi antitesis. Yo soy lo opuesto: toco dos cosas, mi bajo y mi telecaster. Siempre uso el mismo sonido. No sé hacer solos, sólo hago rítmicas -ojo, pq es lo q me gusta- y soy muy poco colorista. Supongo q por eso en Ch no hay ese rollito rivalidad entre guitarristas egocéntricos, los dos sabemos qual es nuestro sitio aparte de querernos un rato. Otra cosa más q nos convierte en una anti-banda de rocanrol, y van...

El caso es q ya hemos grabado las guitarras de Canciones para perder una guerra y Harte. Slides, tremolos, distorsión, la verdad es q están quedando muuy guais, son dos temazos cómo una casa. Suenan a canción, son redonditas y pese a q la primera es más poppie y la segunda es rocanrolera con mala leche, suenan chocadélicas a más no poder. Hay disco chavales.

Mientras los títulos se me aparecen en sueños, el último Todo esto serán campos, en la linia d pensamiento surgida tras un fin de semana de drogas en la montaña q genero una pseudo-filosofía llamada desprogresismo q sostiene q hay q devolver la patata a las Américas y derribar todos los centros urbanos para empezar de nuevo la civilización sobre unas bases saneadas. Total, ya véis a multitud de operarios dedicándose a desmantelar autopistas. Me molaba también Monstruos Modernos, porque no dejamos de ser unos inmaduros emocionales cojos y parias de la coca-cultura, y ya me imaginaba unos retratos nuestros con deformidades en el rostro para la portada... Bueno, supongo q todavía hay q darle más vueltas. Dani Doc opina q quizás para este disco no hay q generar un concepto y crear una cosmogonía político-cultural, q tan solo hay q hacer un compendio de canciones q sean un reflejo de nuestro momento creativo... pero lo q no sabe es q estoy a punto de apuntarnos a una secta q cree q en el 2012 todo se va a ir a tomar por el culo.

Tengo unas ganas de q se termine el verano y llegue el frío macho...

Por cierto, si estáis en Bcn el martes 25, los Chocos tenemos un bolo de última hora en las Fiestas Alternativas de Sants 2009, en la Plaça d'Osca, a las 22h. Quien se pase puede q reciba un sipiajo.

Salud y anartismo.