domingo, 12 de junio de 2011

EL DISCURSO, Ch en el Simbiruta Fest, Bcn, 11.6.11



Las cosas como son, el bolo fue visto y no visto.
Todo el día amenazando lluvia -no está mal éste junio lluvioso, retardemos el bochorno lo máximo posible, anda!-, pese a las buenas intenciones de la gente del Casal de Joves de la Guineueta el festival iba con un retraso de 1 hora según lo previsto, y nuestra hora de actuación pasó de la 1:30 a las 2:45, con el consiguiente, hay q ser honesto, aburrimiento por parte de los mamaos. Las drogas no llegaron y nada pudo dilatar los 50 minutos q duró el show.
Ey, 50 minutos MUY intensos, q duda cabe. Habían ganas locas de tocar el show eléctrico, había nuevo set de temas, tocábamos por primera vez unos cuantos del nuevo disco, nueva intro, y estamos pasando por una coyuntura socio-política muy favorable para el discurso chocadélico.
Desde q han empezado las mobilizaciones de los llamados "indignados" da la sensación de q canciones como La revolución no va a ser televisada, Este país se come a sus jóvenes, Harte, Anartismo & Chocadelia y El Fin está cerca son una banda sonora perfecta para describir el descontento q genera éste progreso caníbal e inhumanizador llamado capitalismo.
Y es q poco hay q decir entre canción y canción, Chocadelia es cada vez de una manera más decidida y autoconsciente una banda con mensaje. Pero es q además, toda la vertiente anarco-sexual de cuestionamiento de las relaciones y del sexo no es más q otra acepción del mismo discurso, pero alejado de un marco general y llevado a uno individual. Y es q la tan cacareada revolución -esto no es una revolución, es una toma de consciencia progresiva- no llegará a ningún lado si no empieza por la revolución del individuo: que es lo q necesitas realmente para vivir, necesidad o consumismo, cuanta energía necesitas para tú día a día, cuanta puedes ahorrar, autoresponsabilidad, autosostenibilidad,.. Y más allá, ser honesto con uno mismo y con la gente q te rodeas, el precio de la coherencia personal, del no encajar con el modelo mono-parental occidental, de la espectativa de tener una familia como obligación social. El engaño, el autoengaño, la autocensura, la diferencia asumida como algo positivo y llevarla a tu día a día. Bruja, Amiga Ninfómana, Aventuras y desventuras de una pareja no-ideal, hablan de en esos términos, aunque estén vestidas con más o menos sátira, porque es a través de ella con la q se descubren los fallos en la moral imperante y nuestras propias incongruencias, amigas inseparables, pero no por ello menos sujetas a crítica.

Es genial empezar el bolo con El Fin, una crítica despiadada al inmobilismo de la mayoria silenciosa, y sentir q las palabras no están memorizadas, están asumidas. ¿Entendéis? Es lo q pienso, lo q pensamos, dicho con mis palabras, con nuestras referencias vitales y culturales.
Ha sido un largo camino que nunca terminará -y es genial q así sea- q empecé escribiendo letras infantiles sobre estereotipos roqueros y romanticones, q se pasó al cripticismo formal sin significado alguno con palabras rimbombantes e impactantes, luego llegó a un estilo como el disco en el q en principio las letras son superficiales y un mero trámite para un desarrollo rítmico que haga bailar al personal, pero q al encontrar el funk y su trasfondo social y político empezó a variar. Se podían decir cosas de tu realidad inmediata y al mismo tiempo divertir, entretener, hacer bailar. Se podía hablar de follar y de cagarse en el poder, pq la dominación lo es tanto social como sexual. Sexo y política son dos conceptos siameses.
Y el siguiente paso, y creo q el más complicado, es ya hablar de esos temas aplicados a la vida de uno mismo. Hablar de ti en tus canciones, ser tú el protagonista de tu obra. Reconocerte en tus letras es algo duro, tanto en la práctica, ya q has de encontrar las palabras justas para no tergiversar lo q piensas -el lenguaje es muy puto- y sintetizarlo en formato canción, como en el fondo, ya q hablar de tus problemas es hablar de tus relaciones con la gente a la q quieres, q pueden perfectamente sentirse aludidas, dolidas o molestas.
Por eso me cuesta tanto escribir letras para Chocadelia, y soy extremadamente lento en ello. Me cuesta sentirme satisfecho con lo q escribo -y eso q soy un mindundi, y estoy tan solo empezando en éste tipo de expresión.
Pero el próximo disco está en éste camino. Y es un placer cantar estas canciones, pq salen solas de mi boca y mi cabeza, y esa es la mejor manera de transmitirlas a la gente, la manera de hacerlas entender, de transmitir el discurso chocadélico. Y lo mejor es ver como la gente escucha, rie, y se queda con la idea, de una manera más o menos profunda. Vamos por buen camino, lo noto. Nos podremos comer la mierda, pero no pasaremos desapercibidos, pq hay un discurso propio, y eso hace q, aunq tengamos más o menos conciertos, haya una implicación personal por parte de todo el grupo fuera de toda duda. Es nuestra vida, a fin de cuentas, la q estamos trasladando a los escenarios. Ya puede ser en una fiesta alternativa despues de un grupo rumbero, telonenando a un grupo roquero, en una sala delante de 10, en una plaza de pueblo, o hasta en un garito subvencionado por la Sgae. Aquí no se calla nada, aquí se muerde la mano del q te da de comer, pq Chocadelia es así, si no, haberte escuchado antes a quien llevabas a tu sala. Chocadelia es cruda e incómoda.
Y lo más interesante es q esto no ha hecho más q empezar.

Bueno, a todo esto parece q seamos perfectos. Falso, el bolo estuvo bien, pero estamos verdes, demasiado concentrados y quizás poco espontáneos. Hubo caos, desorden vocal y harmonías marrones. Poc a poc. Falta ritmo, precisión, empaque, y no será fácil conseguirlo sin bolos.
Pero hay discurso.