miércoles, 26 de mayo de 2010

CONSORCIO ANTI-POP



Sras y sres: El anti-pop


Francamente, estoy hasta los huevos del pop. Del pop mainstream por lo insultante de su discurso, envoltorio y infestación. Del indie porque parece que tenga el coto exclusivo para representar la sensibilidad del universo entero. Si no haces pop, no eres sensible. No puedes expresar emociones complejas, no puedes representar los problemas de tu generación sino es bajo la forma y las maneras del pop.
En éste país, o haces pop o eres un zero a la izquierda. El rock es un "mercadillo" en comparación, y su circuito es mucho más reducido. El funk ya ni te digo, somos cuatro pringaos verbeneros que hacemos bailar a la peña, aunque ahora ya hasta eso lo hace mejor el pop. Ya puedes tocar cómo el culo, tener un directo de mierda, o, seamos justos, en algunos casos tocar bien y tener un directo decente, pero para nada mejor objetivamente que un show de esos "a la americana" (sudor, energía, actitud proactiva, "entertainment"), que ya tienes mucho ganado. La crítica, la atención de un público especializado, la presencia en el circuito de festivales,... La nueva promesa blanca. El nuevo sonido de Barcelona. El nuevo sonido de Catalunya. El nuevo sonido de España. El nuevo sonido de las Alpujarras.


Pop es lo popular. El sonido que suena en cada generación, que la define sonicamente y cuyas letras reflejan sus emociones, sus códigos de conducta y sus problemáticas con su lenguaje específico. Por tanto, es natural que nuestras música no sea pop. No compartimos ni esos códigos, ni esa sintaxis, ni esa actitud, ni tan sólo creo q veamos el mundo de la misma manera. Por tanto, no existimos. Por no ser, no somos ni world music, y eso que somos blancos haciendo música de negros del siglo pasado. Ya podemos a veces conjurarnos para introducir elementos pop en nuestras canciones, porque q coño, no somos monolíticos y somos receptivos a lo positivo que cualquier género musical puede aportar, que nunca seremos pop. Aunque hagamos pop, nunca seremos pop. Q gran paradoja. ¿Se nace o se hace pop? La verdad es q empiezo a pensar q se nace.


La segunda problemática derivada de todo esto es lo restrictivo de la etiqueta. Si sólo lo pop habla de lo q inquieta o define a tus cohetaneos, en donde nos deja eso a los demás, q no definimos más q a nosotros mismos y con un lenguaje radicalmente opuesto a la trascendencia y a la emotividad, y al surrealismo pacotillense? Pues nos deja cómo a unos tipos/as muy simpaticotes. Ya sabéis: cómo era la chica? Muy simpática. No somos muy relevantes, y nuestro humor es demasiado grueso y nuestro discurso demasiado "radical". La sutilidad y lo críptico están absolutamente sobrevalorados, quizás porque son el reflejo del carácter de toda una generación acomplejada por el peso de una tradición cultural-política-social anterior q es demasiado grande cómo para superarla y aportar algo nuevo... Introspección y mundos interiores a ritmo de sintetizadores cutres y guitarras desafinadas. Bueno tío, si tu guitarra no está desafinada seguro que tu voz si lo está.
¿Y qué si lo está? Diria yo mismo... al final todo es una cuestión de gustos. No me gusta el pop indie. Creo q está sobrevalorado. Creo q hay una sobreexposición en la prensa especializada. Creo que es exclusivo y no inclusivo. Creo q es aburrido. Prefiero negrotes con pipas, q quieres q te diga. Al menos te ries viéndolos, pero ver a unos tipos tristes y vergonzosos... eh tío, q esto es un espectáculo. Puestos a comunicar tristeza y vergüenza, hazlo con estilo. Y ojo, el pop con clase existe, preguntádselo al sr.Chokapic, q él de esto sabe un huevo.


Rumbo a la hecatombe. Consorcio anti-pop.

jueves, 13 de mayo de 2010

AL MARGEN

La crisis: "-¡Voy a por tí!"
Crisis de los cojones... Me deja perplejo toda esta mierda q estamos viviendo. Parece q, despues de Grecia, seamos los siguientes en pringar. Pero la vida sigue, eso si, con un nubarrón gris encima de nuestras cabezas... el cielo amenaza con caernos encima. Digo q la vida sigue pq la gente sigue haciendo lo q hacía siempre; si, ok, fijo q ahora la peña se lo mira dos veces antes de ir a un restaurán (mola sin T), pero la sensación de normalidad anómala impera en las calles. Fijo q es un fenómeno muy de clase media, esa q tal y cómo van las cosas irá ampliando las filas de la clase baja progresivamente. Esta ya está pringando, más si cabe ya q siempre ha justeado y sobrevivido con lo puesto y los restos, y no deja de alarmar ver a colegas de mi madre en el puto umbral de la pobreza, teniendo q ir a Cáritas para asegurarse un par de comidas diarias. Y la clase alta... a su puta olla, alarmando al personal por la bajada de los beneficios bancarios (bajada, q no pérdidas) y yendo a su mega-finca en la jodida primera linea de mar en una zona protegida y sometida a leyes-chiste de costas. Las cajas se fusionan y cualquier día de estos alguna dará otro susto y cuando vayas a sacar pasta esta se habrá volatilazado. ¡Eh tío, en realidad nunca existió!
Pero bueno, te encuentras con conocidos de la infancia y la peña tiene críos, un curro en la administración o una profesión liberal y ya se sienten viejos. Qué interesante.
¿Se puede vivir al margen de todo esto?
Esto de la música es perfecto para sentirte un poco fuera del sistema, es la puta verdad. Vives en tú burbuja de micro-éxito q es el tener conciertos y vas tirando millas. Un día, si has ganado algo de pasta, te recomiendan q hagas la declaración de renta... ¿El qué? Si, si, q si no te pueden meter un paquete. Buah, lo llevas a un gestor, y cómo cuando terminan tus 5 segundos empiezas a cotizar a piñón -porque cada vez trabajas menos en negro, ese maravilloso concepto q ha imperado en la última década en la economía sumergida del espectáculo- pero a cobrar menos tb, ya q hay menos bolos, un día el estado te devuelve algo de guita. Magia.
A parte de eso, el contacto con el exterior es ínfimo. Eres un memo, tú ámbito laboral es la cosa más desregularizada del mundo, y la SGAE impone su ley en lo referente a los derechos de autor. Eso cuando no te has metido en una multi: entonces la alienación es total. No me quiero imaginar la imagen del mundo q tienen el 80% de los artistas del mainstream. Todo quiero la paz, primero los niños, siempre contra la violencia de género, y el imprescindible concierto benéfico de turno. Pero vamos a ver…¿Qué la música se ha de mantener al margen de la política? Pero mamao, que de lo q hablamos es de q no tienes ni puta idea de lo q pasa a tu alrededor!
Me desvío. Da lo mismo, vives en tú cúpula, YO vivo en mi cúpula. Trabajo haciendo música en un local, con un grupo de 15 personas aprox. Es nuestro micro-cosmos, nuestras normas de conducta, nuestra manera de comunicarnos, nuestros hábitos cotidianos. Lo guay es q en la vida ha habido ni un problema por pasta ni mal rollos personales. Eso es genial. Momentos difíciles en cada banda, los q quieras, pero siempre mucha confianza mutua. Y las cosas no van bien, la crisis es una mierda y hay poco curro y tienes q hacer cosas q no te molan para subsistir, pero vamos tirando. Haciendo cosas cada vez más alejadas de lo q mola pero cada vez más personales. Suicidándonos vaya, siendo poco inteligentes. Estando al margen.
Creo q es una jodida postura vital, estás al margen cuando todo lo q te rodea va en una dirección y tú estás en la otra punta, lejos. “A mi no me pillan”, te dices para adentro. Ya sabéis, no hace falta hombre del tiempo… Debo reconocer q en los últimos años la realidad ha ido ganando batallas y haciéndose fuerte en nuestras vidas, pero creo q todos los chocos seguimos estando al margen. Ojo, no digo q estar al margen sea guay, trae consigo problemáticas de otra índole q no son fáciles de manejar. Me refiero a q no tenemos ni puta idea de donde irán a parar nuestras vidas, y aunque eso no sea específico de Chocadelia (le pasa a un tanto por ciento enorme de la gente), si q creo q dejamos pasar voluntariamente la oportunidad de subirnos al carro ganador. Supongo q parte del discurso chocadélico esta muy impregnado de esta coyuntura. Pero es q es una enfermedad: querer hacer lo q te gusta. Y aguantar hasta q vengan los Geos y echen abajo la puerta de nuestro escondrijo. A veces –muchas- me pregunto q coño haría si no hiciese lo q hago… Y no me lo imagino, la verdad. Sobrevivir, supongo.
Todo esto venía pq es un privilegio estar al margen, aunque sea el camino más complicado -o el más fácil.

Bah! Q me jodan!